21 septiembre 2013

Mujer, vence la depresión!

He sufrido depresión por años, he perdido tiempo que Dios me regaló llorando, sufriendo y temiendo. No estoy dispuesta a continuar haciéndolo. Yo decido elegir VIDA en lugar de MUERTE. Jesús no murió en vano.  Jesús murió para darnos vida eterna, y allí no hay lugar para el espíritu de depresión.

A diario DEBO elegir levantarme, porque Satanás ya descubrió cuál es mi punto débil y es persistente en su ataque. Pero YO SOY MÁS PERSISTENTE EN LA ORACIÓN, LA ALABANZA Y EN CREER EN LAS PROMESAS DE MI PADRE, continuaré batallando, porque ahora tengo las armas para la lucha que me las dio mi Dios amado.

Hace unos días, fui consciente que mi batalla, es la de otras mujeres. Y COMPRENDÍ  que puedo ayudar a muchas con mi testimonio y vivencia. Debo interceder por todas aquellas que sufren por este espíritu maligno. 


NO SOY VÍCTIMA, SOY UNA GUERRERA DE JESÚS. 

¿Me ayudas a interceder?

“Mira que te mando que te esfuerces y que seas valiente;
no temas ni desmayes,
porque Jehová tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.”
Josué 1:9

La depresión es un espíritu  que se arraiga en la mente trayendo desespero y poco deseo de vivir. En este último tiempo está atacando y destruyendo la vida de muchas mujeres, quienes son más propensas a experimentar esta situación. El número de mujeres afectadas por la depresión es un 50% más elevado que el de hombre, según la Agencia AFP 8/10/2012.
La depresión está aliada con el temor, que ataca las emociones y la mente llevando a la persona a un estado de incertidumbre y de inseguridad. Por algo Nuestro Señor en la Biblia nos dice muchísimas veces: NO TEMAS!!

La mayoría de las enfermedades que tiene el ser humano del siglo XXI son psicosomáticas, pues se desarrollan en la mente haciendo que pierda la paz y tranquilidad que sólo en Dios se pueden tener. En Él podemos tener gozo, alegría, esperanza, confianza, prosperidad, abundancia y tranquilidad. Por eso nuestro Padre nos dice: “Venid a mi los que estén fatigados y cansados y Yo los haré descansar”.

Satanás intenta derrotarnos con estrategia y falsedad, con planes bien calculados, por eso Jesús lo llamó: “…mentiroso y el padre de la mentira” Juan 8:44.

Al ser tan hábil, no nos dice la mentira de una sola vez. Comienza por bombardearnos la mente con un patrón ingeniosamente imaginado de fugaces pensamientos irritantes. Él conoce perfectamente nuestras inseguridades, nuestras debilidades y nuestros temores. Está dispuesto a invertir TODO EL TIEMPO que haga falta para derrotarnos. UNO DE SUS PUNTOS MÁS FUERTES ES LA PACIENCIA.

Mediante su cuidadosa estrategia, Satanás intenta levantar “fortalezas” en nuestra mente. Una fortaleza es un área en la cual nos mantiene en atadura (en prisión) debido a cierta manera de pensar. Por eso nos Jesús nos advirtió que nuestra batalla “no es contra sangre y carne”.

Cuando nuestra mente está siendo atacada por el enemigo encontramos: nervios, vértigo, molestia, enojo, gritería, resentimiento, pesadez general, violencia, odio, preocupación, intranquilidad. Una persona con depresión es una bomba de tiempo, que en cualquier momento estalla y hace daños irreparables para ella y los que la rodean.

El único que trae destrucción en nuestra vida es el diablo. Y Dios nos dio a nosotros las armas en Efesios 6 para derrotarlo.

Cuando tu mente ha sido envenenada, cuando Satanás ha ganado fortalezas en tu mente, tienes que renovarla de acuerdo a la Palabra de Dios. Eso se hace aprendiendo la Palabra y meditando en ella (ponderándola, murmurándola para ti mismo, pensando en ella).

“…Si vosotros permanecéis en mi Palabra,
verdaderamente sois mis discípulos,
 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.”
Juan 8:31-32

Aquí Jesús nos dice cómo hemos de lograr la victoria sobre las mentiras de Satanás. Tenemos que adquirir el conocimiento de la verdad de Dios en nosotros, renovar nuestras mentes con Su Palabra, y después emplear las armas de 2 Corintios 10:4-5, derribar las fortalezas y toda cosa altiva que se levante contra el conocimiento de Dios.

Debemos permanecer en  la Palabra hasta que se convierta en la revelación dada por inspiración del Espíritu Santo.

Otras dos armas espirituales disponibles para nosotros son la alabanza y la oración. La alabanza derrota al diablo más rápido que ningún otro plan de batalla. Satanás no soporta que mientras nos está atacando, nosotros alabemos a Dios, él pretende separarnos de Nuestro Señor.

La oración es la relación con Dios. Es ir y pedir auxilio o hablar con Dios de algo que nos preocupa. Puedes tener una excelente relación con el Padre, habla con Él, eso es orar. Debes saber que Él te ama, que está lleno de misericordia, que te ayudará. Conoce a Jesús. Él es tu amigo. Murió por ti. Conoce al Espíritu Santo. Él está contigo TODO EL TIEMPO como tu ayudador. PERMITE QUE TE AYUDE.

Aprende a llenar tus oraciones con la Palabra de Dios. Esa Palabra es el arma para derrotar al espíritu de depresión que está atacándote. Recuerda que estamos luchando con seres espirituales de maldad, respondemos de forma espiritual, citando la Palabra. Jesús la empleó en el desierto para derrotar al diablo (Lucas 4:1-13). Cada vez que el diablo le mintió, Jesús respondió con “Escrito está,” y le citó la Palabra.

¡Tú eres también una GUERRERA! 
¡Levántate y da pelea por tu vida!


Silvia Cristina Añon – Fundadora del Grupo Intercesor “LAS GUERRERAS DE JESÚS”

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No dejes de escribir tu comentario!!
Nos será de edificación!
DIOS TE BENDIGA!